Gazapo!
Odio la navidad
Si. Lo siento pero es así. Hoy es posiblemente el dia más aburrido del año. Me voy del piso y cruzo media ciudad invadida por padres noeles trepadores hasta llegar a casa de mis abuelos. No tardan en llegar mis padres, acompañados de los insalvables "estás muy flaco" y "a saber que vida llevas". Al cabo de un rato llega mi tio, ese que en otra vida fue luchador de kick boxing, con sus palmaditas en la espalda. Tras recomponerme dos o tres huesos dorsales, mis dos sobrinas pequeñas empiezan a corretear dando vueltas y a pegarme puntazos de pie mientras se ríen inocentemente. Sólo faltaba mi tía con su "venga niñas, id a jugar con Alberto". ¡¿Por qué no las manda a jugar con el pelapatatas!?
Tras la extensa comida y la consecuente indigestión de crustáceos variados, mi abuelo tiene la bondad de sentarse a mi lado y relatarme sus experiencias. Cabe decir que sus relatos duran dos horas y sus experiencias comprenden toda su vida de "trabajo duro" y "penúrias económicas". En fin, solo queda despedirse de todos, hacer una forzada y pomposa sonrisa i desearles a todos unas felices fiestas... Sinceramente me importa un bledo lo bien que lo pueda pasar mi querida familia.
Por fin me he sentido a salvo cuando he salido de aquella casa y he vuelto a la fría rasca invernal, las sucias calles de cemento, la falsedad consumista... Pero hay que sonrreir, que es Navidad!
jou jou jou!
y espialidoso!
Una fiesta o algo de eso
Que si nosequé de una fiesta, que si nosecuántos de un montón de botellas, ... No la he entendido muy bien hasta que ha entrado en mi habitación y se ha puesto a gritarme in situ. ¡Qué pesadilla! Si no hicimos nada. Unas cuantas cervezas y un par de amigos, nada más. Además, que me eche ella la bronca por dejarlo todo hecho un desastre... ¡Yo ordené perfectamente todas las botellas!
Revisando el salón, me he dado cuenta de que quizás sí nos bebimos algo más de unas cuantas cervezas... ¡Uff! Como se enteren mis papis me matan. Yo no soy así, no hago ese tipo de cosas ni muchísimo menos.
¿Abracé ayer a Estrella? Dios, te ruego que la respuesta sea negativa...
En estos momentos me dispongo a limpiar la cocina después del pequeño gran desastre que organizamos. Y por lo que he visto me lo voy a tener que tomar con muuuucha tranquilidad. O llamaré a la asistenta de mis papis, quizás eso sea mejor idea...
Resaca no es un nombre de mujer
Pesadilla antes del amanecer
Anoche estaba tremendamente cansada asi que me acosté pronto en mi cama. Si se le puede llamar cama a ese montón de plumas sobre un criadero de carcomas. Al cabo de algunas horas, que a mi me aprecieron escasos minutos, un fuerte barullo me despertó. - Ya están montanto follón los de arriba- pensé. Pero aquel ruido estaba mucho mas cerca. Concretamente en el pasillo.
Adivinad que ví cuando abrí la puerta. El piso era un inmenso charco de cocacola mezclada con algún alcohol no autorizado. Había tanta gente allí comprimida que aquello desafiaba las leyes de la física. El camarote de los hermanos Marx era una burda exageración comparado con la muchedumbre que allí había. De fondo se escuchaba AC/DC, mientras que un borracho con una corbata en la cabeza hacia movimientos sensuales encima de la mesa del comedor. Espera un momento...¿¿Alberto??
- Jaaaainweeeey tu jeeeeel jainweeeey tu jeeeel- Fué la única explicación que recibí.
Aunque la mayor impresión aún estaba por venir. Vanessa me abrazó por detrás e intentó hablarme, aunque solo consiguió pronunciar algunos sonidos:
-¡Vamossh Etresha a bebeg po nuesshtra supesuperamisshtad!
En la vida me la hubiera imaginado en aquel estado. Estoy muy cabreada. Ahora después les pienso hechar una reprimenda, y no me importan que tengan resaca.
Mira que hacer una fiesta...¡y no avisarme!
Crónica de un domingo por la mañana
5:30. Me despido de mis amigos.
6:00. Llego a la puerta del piso. Tras seis intentos para abrir el portal, empiezo a dudar si nuestra puerta es de verdad el número 37 de la calle.
6:01. Llego al número 35. Abro la puerta tras seis intentos más.
6:10. Subo al piso. No recordaba que tuvieramos en la finca escaleras de caracol, ni que ondularan según la subida. Por suerte, las he domesticado a tiempo. Entro al piso sin hacer ruido.
6:11. Me cargo un espejo. Creo que era de Vanesa. Mañana alguien me va a hacer morros...
6:12. Tiro una cacerola al suelo.
6.13. El marco de la puerta del pasillo conspira contra mi, y se mueve instintivamente para que choque contra el al passar, haciendo retumbar todas las paredes.
6:14. Giro el pomo de la puerta de mi cuarto
6:14. Vuelvo a poner el pomo en el hueco.
8:00. Mis compañeros de piso entran descaradamente en mi cuarto con recojedores y fregonas cual armas antidisturbios, y al lema de "Estrella, hoy toca limpieza" me sacan de mi placido sueño para llevarme al maldito mundo de la resaca.
Algún dia se lo devolveré, y de una forma muy cruel. ¡¡¡Muajajajajaa!!!
¡Y qué más nos puede pasar?
Esta mañana acabadita de levantar iba yo felizmente al encuentro de mi sesión de belleza diaria (esta piel necesita cientos de cremas carísimas) con ducha incluida. Y cuál ha sido mi sorpresa cuando al abrir el grifo del agua caliente ¡se ha quedado en mi mano! He sufrido un shock momentáneo ¿cómo era posible que todas estas horribles horribles cosas me estuvieran pasando a mí? Nada he hecho para merecerlo ¡si hasta dono la ropa de la temporada pasada a instituciones benéficas! Y eso sí que es ser buena persona. Dónde se ha visto que un pobre vista pantalones de Ralph Laurent si no fuera por mi desinteresada ayuda...
Pero bueno, el caso es que ahí estaba yo, delante de la ducha, con un grifo en la mano y totalmente estupefacta. Mi grito de sorpresa y horror ha despertado a Alberto, que ha venido en mi ayuda (por enésima vez). Evidentemente Estrella nisiquiera se ha molestado en venir a ver qué sucedía, claro, como ella no utiliza la ducha... El pobre chico ha hecho de manitas y de psicólogo improvisado. Pensándolo bien incluso es simpático, a pesar de ese pelo largo y sucio que tiene.
Hoy me he ganado al sesión semanal del spa a marchas forzadas. Masaje de chocolate, baño de algas japonesas y baño turco, no necesito nada más para volver a estar impecable. Y todo por solo 80€. Perfecto.
PD: adjunto foto del grifo en cuestión. Por la pinta que tiene yo diría que del siglo XIX como poco. ¿Apuestas?
Leer más...Por muy psicópata que suene...
El otro dia la rubia prende la cocina. Ayer la otra, no se como, se cargó el calentador. Estoy harto de hacer de manitas de la casa!!!
Encima hoy en la tienda mi jefe me ha hechado la bronca, simplemente porque me puse a provar la calidad profesional de un juego nuevo que han traido. (alomejor se molesto porque lo probara durante cinco horas seguidas, vete tu a saber, pero claro, si una cosa se prueba, se prueba bien)
Después del desastre de hoy no he tenido otro remedio que refugiarme en mi Estrella de la muerte particular y empezar una nueva misión del GTA. No hay nada más desestresante que correr por Vice city matando gente a diestro y siniestro.
Sé que suena un poco de psicópata, pero ¡probadlo! Me daréis la razón seguro.
Estrella y su intento
Esta es la nota que he encontrado pegada al calentador de agua cuando me he dispuesto a ducharme esta mañana:
Método para encender el nuevo calentador X2000 advance:
- Gire la rueda A tres veces en sentido de las agujas del reloj mientras mantiene pulsado el botón Flame a media distancia.
- Si ha despulsado el botón Flame durante la operación gire la manivela B hasta que quede paralela con la palanca C.
- Una vez realizada la operación seleccione Air con la manivela Z mientras acciona el botón Flame junto a la rueda de gas, la cual debe estar en dirección a la manivela B. En este momento el aparato deberia expulsar una pequeña llamarada.
- ¿Su calentador expulsa agua en vez de fuego? Compruebe el usuario que no se ha confundido con la cisterna del inodoro.
- Una vez que el usuario llegue a este punto, el calentador ya deberia funcionar correctamente. Para posibles problemas consulte con nuestro servicio técnico.
- Fabricado por: James & Walace, 1893.
Conclusión: No hay nada más revitalizante que levantarse por la mañana y darse una duchita con agua recién transvasada del iceberg más cercano.
La gran gesta de Alberto
Ayer tuve una aventura digna de ser contada en los códices de la historia.
Estaba yo tan tranquilo leyendo el nuevo comic de "Chanquete, el cefalópodo invencible" cuando unos gritos resonaron por toda la casa. No habia ninguna duda, una doncella en apuros pedia desesperadamente que la rescataran. Sin vacilación posible tomé mi espada matademonios y salí de mi habitación en su busca. Tras cruzar el pasillo del descanso eterno llegué al rellano de los dioses, donde tuve que lidiar con las cucarachas demoníacas del lejano E'koparc. No tardé en divisar mi destino: la gran cocina sagrada estaba en llamas, y una pobre virgen pedia a gritos mi ayuda. Con gran destreza pude apagar el fuego maligno y liberar a la víctima de las garras del demonio, el cual estaba materializado en un huevo frito carbonizado.
Ahora que pienso quizá haya exagerado un poco mi relato...
Pequeño incidente gastronómico
¡Oh Dios mío!
Si por mí fuera utilizaría el horno para guardar zapatos.
Mi propio espacio ¡No lo puedo creer!
No he podido resistir más. Lo he hecho. Tenía mi cajita mágica a la vista y he sacado un poquito de mi cosecha particular. Y no quería, mi subconsciente me ha poseído, lo juro. Aunque ahora sí que se respira tranquilidad. Espero que a mis compañeros de piso no les moleste…
Una que se marcha a otros mundos. Jamin, jamin, jamin…
Saludos desde mi humilde guarida.
El pisito no pinta nada mal. De momento nos hemos encerrado cada uno en nuestra habitación para instalarnos. Y en mi caso hablo literalmente. No he resistido la tentación de sacar mi pequeño televisor, el cual siempre llevo conmigo para emergencias como esta, y enchufar mi nueva playstation 3. Que sensación más maravillosa recorre mi cuerpo al sentir cómo el mando se desliza entre mis manos, cómo espero ansioso los preliminares cuando se pone en loading, una y otra vez, pantalla tras pantalla, hasta llegar al éxtasis, por fin me he pasado otro nivel!
En fin, dentro de un rato saldré para ver como andan los otros. Y cuando no haya más remedio tendré que sumirme en la aburrida tarea de abrir mi maleta.
No huele…a…aa…¿marihuana?
Vanesa dice: ¿¿dónde me he metido!!
Alberto
Se acabaró el vivir en una pocilga. Las chicas son más limpias, ¿no? O eso dicen. Por fin aire fresco en mi rutina,ya era hora de vivir de forma civilizada, o al menos relativamente. Me pregunto si me dejarán poner la Play en mi cuarto, porque si no... del salón no me mueven. Viva el espíritu Homer Simpson. Hablando de Homer, tendré que decirles que la cerveza para mí es como el aire, que sin ella no respiro.
Cuando he visto a una chica rubia acercándose a mí con cuatro maletas y un bolso gigante (que seguro que duele si te lo tira a la cabeza) no pensaba yo que sería una de mis compañeras de piso. Tan mona y tan fina ella moviendo las caderas como si se fuera a descoyuntar en cualquier momento. No sé cómo interpretar la mirada que me echó. ¿Se habrá enamorado perdidamente de mí? Seguiré investigando. Mientras conseguía un perfect con Brian (efectivamente, hablo del Tekken 5) llegó la otra chica. Esta sí que parece más simpática, no ha parado de hablar y no sé, me ha caído bien. Hasta nos haremos amigos y todo.
Estrella
Vanesa
Pero antes de entrar en la casa, el primer impacto han sido mis compañeros. Habíamos quedado en el portal (por llamarlo de alguna manera) para entrar los tres juntos en el piso, pero Luna ha llegado como media hora tarde. Y ahí estaba yo, de brazos cruzados, con mis adoradas maletas de Tous intentando no poner una cara excesivamente desagradable ante lo que tenía delante, osea, ¡un chico con pelo largo! Pero dónde se habrá visto eso... Y muy simpático tampoco es que fuese. No dejaba de jugar con un aparatito negro, la psps o algo así me ha dicho. Total, un desastre. Pero la escena no mejoró cuando conocí a mi compañera, que yo sinceramente, me esperaba otra cosa cuando mi amiga Espe me dio su móvil para ver lo del piso. Ha sido un shock total: ¡si hasta lleva dos rastas de esas! Y pantalones que parecen de pijama y una camiseta rota... por Dios, necesita unas clases de estilismo urgentemente.
No sé qué pasará a partir de ahora, pero de momento me esperan El canto del loco en mi ipod rosa, por supuesto. Creo que necesito una sesión de shopping para recuperarme.